Conozcamos más sobre el SIMS (Síndrome Inflamatorio Multisistémico) en niños, asociado a la COVID-19.

La pandemia de COVID-19 ha traído una nueva afección grave e inusual denominada Síndrome Inflamatorio Multisistémico en niños, de la cual aún hay mucho por conocer.
A la fecha, en el Perú, 23 mil niños han sido infectados con COVID-19 y 81 han fallecido. En las últimas 4 semanas ha habido un 90% de incremento en casos de COVID-19 en niños menores de 2 años
Llamamos SIMS asociado a COVID-19 en niños, a aquel proceso inflamatorio descontrolado y con repercusión de múltiples órganos y sistemas que ocurre posteriormente a la infección por COVID-19 en los pacientes pediátricos.
“El primer signo de alerta, es la irritabilidad constante sin causa aparente, y la presencia de fiebre constante. Dentro de los síntomas más usuales tenemos la fiebre prolongada, enrojecimiento de las conjuntivas, rash en la piel (enrojecimiento), mucosas en la boca, presencia de adenopatías, que son ganglios aumentados de volumen, así como decaimiento y malestar general” refirió el Dr. José Cornejo – Cardiólogo Pediatra del Hospital “San Bartolomé”
Muchos de los pacientes pediátricos que inician este tipo de sintomatología, han sido infectados anteriormente por coronavirus, lo cual no descarta que si en algún momento el menor no presentó ningún tipo de signos de alerta dentro del periodo de contagio, no pueda manifestar el SIMS (Síndrome Inflamatorio Multisistémico) hasta 4 semanas después de padecer la enfermedad, por ello la complejidad de ésta patología.

“El “San Bartolomé”, al ser un centro de referencia también se han atendido pacientes con este diagnóstico. La detección se realizó con pruebas de laboratorio para evaluar marcadores inflamatorios como PCR, VSG y Hemograma. Además del antecedente de contacto con COVID-19. Dentro de las herramientas de imágenes disponibles se encuentran la ecocardiografía, que nos permite evaluar el estado del corazón y su funcionamiento, así como valorar la presencia de una de las complicaciones más graves que es la dilatación de las arterias coronarias” manifestó.
Al tener el tratamiento oportuno con la medicación antes mencionada, se ha podido evitar las complicaciones más graves y lograr una evolución favorable de nuestros pacientes.
“Dentro de los cuidados al paciente se encuentra principalmente el monitoreo cercano de los síntomas y del proceso inflamatorio. Una vez que se ha comprobado el síndrome se debe tratar con un medicamento especial llamado Gammaglobulina EV, además de administrar corticoides y ácido acetilsalicílico, para combatir la inflamación y evitar complicaciones a futuro”. Comentó finalmente el profesional.